








En septiembre del 2017 una vez más la ciudad de México se vio impactada por un fenómeno natural que sacudió física y emocionalmente a sus habitantes. Una de las zonas más afectadas fue la colonia Condesa. Después del ir y venir de miles de personas que se volcaron a ayudar, hubo un periodo donde la quietud y la calma imperaban en la zona. En ese momento, tratando de asimilar lo perturbador del entorno, decidí capturar estas imágenes.